jueves, 23 de junio de 2011

Sexy spa (parte II)

Tan pronto como entramos en el baño turco supe que estaba perdida. Había una pareja en él pero salieron al poco de entrar nosotros. Se les veía felices, muy felices. Nada más entrar, sentimos el impacto de los vapores aromáticos y en pocos segundos, su efecto limpiador, purificante y sobre todo estimulante, sobre nuestra piel. No sabría decir a qué olía pero debía ser una sustancia altamente erótica porque sin apenas tocarnos, los cuatro estábamos excitadísimos.

Poco a poco nos fuimos juntando más. Al principio cada cual con su pareja, luego ya indistintamente. Para mi sorpresa sentí, y no me disgustó nada, el roce de mi amiga L. Empezó acariciando suavemente mi brazo pero al ver que el contacto me agradaba, se fue lanzando cada vez más hasta llegar a los pechos. Viendo el panorama, mi chico se animó a hacerle lo mismo a ella y, por supuesto, M se acercó visiblemente excitado a mí. Comenzó rozando con cuidado mis muslos, lo que me excitó más de lo que nunca hubiera podido suponer. Animado por mi respuesta se acercó aún más y probó a lamer mi vientre, sintiendo muy cerca a su propia mujer, que seguía acariciándome pechos y espalda, sin duda dos de mis puntos más erógenos.


Casi jadeando le pedí que continuara. No se hizo de rogar y bajó con su lengua por mi pubis hasta encontrar mi clítoris, que por cierto estimuló con gran maestría. A la vez, mi mano buscaba su miembro, durísimo, grandísimo. Al ritmo de sus lametones, lo fui masajeando. Para entonces, mi R se había separado ya con L y andaban ocupados en sus propios menesteres. Decidí mirarlos mientras M continuaba con su cunnilingus. Mi excitación iba en aumento. Entre el sugerente ambiente, la habilidad de M y la visión de mi chico haciéndole el amor a mi atractiva amiga, no tardé mucho en explotar en un increíble orgasmo, momento que aprovechó M para montarme sobre él y, hacerme el amor salvajemente, lo que me llevó, para mi sorpresa, a un segundo, y aún más intenso orgasmo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cuéntame qué piensas